El parador de Granada o parador de San Francisco fue el primer convento cristiano mandado construir por los Reyes Católicos en el recién conquistado Reino de Granada. Un lugar con más de 500 años de historia que se emplaza dentro de la maravillosa Alhambra.
El parador de Granada y sus orígenes
El convento de San Francisco, actual Parador de Granada, fue mandado construir por los Reyes Católicos en el emplazamiento que ocupaba el Palacio de los Infantes dentro del complejo monumental de la Alhambra. Fue construido por el sultán Muhammad III. Se conservan actualmente restos de este antiguo palacio. Entre ellos el patio, algunas celosías y la qubba de la cual hablaremos más adelante y que merece una mención especial dentro de la construcción.
El deseo de evangelización de la región por parte de la reina Isabel es conocido a través de los siglos y esto supuso que el primer deseo de la monarca tras conquistar la ciudad de la Alhambra fuera el comenzar la construcción de un convento. Éste se encomendó a San Francisco, siendo así por la cercanía que tenía la reina con dicha orden. De hecho, pidió ser enterrada como una franciscana más, con el hábito de la Orden, en el suelo y con una simple losa de mármol encima.
Su construcción finalizó en el año 1494 y fue una edificación que albergó a los primeros monjes cristianos en la ciudad de Granada.
La Qubba o primera sepultura de los Reyes Católicos
Al entrar al primer patio del Parador de Granada podemos ver una qubba islámica perteneciente al Palacio de los Infantes que se conserva casi intacta desde el siglo XIII. Digo casi porque en el suelo yacen dos lápidas que nos indican que bajo el suelo de dicho espacio, estuvieron enterrados los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, los primeros años tras su fallecimiento. Esto fue así hasta que se finalizó la Capilla Real de Granada, actual lugar de enterramiento de Isabel, Fernando, su hija Juana, su nieto Miguel y el Archiduque de Austria Felipe el Hermoso.
Esta qubba nazarí era usada, al igual que el resto de dichos espacios para el esparcimiento, la oración y el descanso de los monarcas de la Alhambra.
Entre todos los paradores de Andalucía, el de Granada destaca por su gran carga histórica, que como hemos podido ver a través de este post, es un lugar único en el que sucedieron muchas cosas.
Posteriormente a la época de los Reyes Católicos, los monjes franciscanos, a mediados del siglo XIX abandonaron el lugar debido al alto coste de mantenimiento y pasó a ser un lugar abandonado. Fue gracias al alcalde de Granada durante los años 40, cuando pasó a depender del Ministerio de Turismo y fue cedido a la recién creada Red de Paradores. Esto hizo que muchos de sus espacios, deteriorados y a punto de entrar en ruina, se salvaran de la desgracia de desaparecer.
El Parador de Granada en la actualidad
Entre los lugares que visitar en Granada, sin duda, recomiendo visitar este lugar ya que no sólo podemos ver antiguos restos de un palacio nazarí desaparecido, sino también disfrutar de un enclave maravilloso junto a los jardines de la Alhambra . Desde su terraza podemos, no sólo ver unas bonitas vistas del Generalife, sino también disfrutar de la paz de su entorno y degustar un almuerzo o bebida.
Al lugar podemos acceder andando desde el centro de Granada, en taxi o en coche. Este último solamente si nos encontramos alojados en el Parador.
Se trata de un agradable paseo por el bosque de la Alhambra que, aunque bien es cierto que es una subida a un monte, el entorno bien lo merece.
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